Los elementos filtrantes son la pieza central de todos los filtros BOLLFILTER y se adaptan individualmente a los diferentes campos de aplicación de nuestros clientes. Ya sea en la industria química, la industria automovilística o la industria papelera, en centrales eléctricas, acerías, en minería o en la extracción de crudo y gas, empleando el tipo de tejido adecuado óptimo queda garantizada en todo momento la función protectora del filtro, además de mantener alejadas las partículas sólidas.
Dependiendo del tipo de filtro y del rendimiento de filtración deseado en los elementos filtrantes se emplean diferentes tejidos y materiales. El medio filtrante como tejido para tamiz o vela filtrante está compuesto de lino, acero inoxidable (acero CrNiMo) o poliéster con diferentes anchos de malla, de tal forma que se puedan cumplir los requisitos conforme al paso de esfera correspondiente o se pueda garantizar el grado de filtración deseado. La finura máxima del filtro, así como la temperatura, la resistencia a la presión y el tiempo de parada dependen del medio de filtrado. Mientras que los tejidos de hilo de acero inoxidable pueden emplearse muchas veces y durante un periodo de tiempo prolongado, los cartuchos de usar y tirar superfino de fieltro deben reemplazarse después de cada uso.
Básicamente, un elemento filtrante se compone de un soporte y del tejido del filtro colocado sobre el mismo. Los diferentes modelos, como los filtros de estrella, los cartuchos filtrantes o las velas filtrantes ofrecen superficies de filtrado de diferentes tamaños. Gracias a la combinación óptima de los componentes centrales es posible conseguir para cada medio el efecto limpiador deseado.
Las velas filtrantes, por ejemplo para filtros de agua automáticos, pueden equiparse en caso necesario con una capa fina con contenido de plata. Este nuevo desarrollo de BOLL & KIRCH denominado FouleX tiene un efecto antiséptico y evita o reduce la formación de una biopelícula. La biopelícula se compone de microorganismos y sus secreciones, las cuales forman hidrogeles en combinación con el agua. Dichos hidrogeles son relativamente estables y es difícil eliminarlos de las velas filtrantes. El recubrimiento multiplica el tiempo de servicio del filtro de agua y simplifica la limpieza, ya que en muchos casos ya no es necesario desinfectar las velas filtrantes.